María Auxiliadora regresó a la calles de Béjar y lo hizo en una tarde con unas agradables temperaturas lo que animó la presencia de fieles.
Decenas de personas acompañaron a la comunidad educativa salesiana en la procesión, que salió del colegio para recorrer las calles del centro de la ciudad. Los más pequeños también participaron llevando una pequeña talla.
Este año como novedad varios tambores de la cofradía de la Vera Cruz acompañaron al cortejo en el recorrido.