Se está convirtiendo en una tradición cada fin de semana. Los merenderos de la Fuente El Lobo amanecen los sábados y domingos convertidos en un auténtico vertedero, con infinidad de resto de los botellones de las noches anteriores: botellas vacías, vasos, bolsas, papeles…
Una auténtica vergüenza y que dejan una pésima imagen de ciudad, sobre todo en estas fechas que es transitada la zona por muchos paseantes
Se está convirtiendo en una tradición cada fin de semana. Los merenderos de la Fuente El Lobo amanecen los sábados y domingos convertidos en un auténtico vertedero, con infinidad de resto de los botellones de las noches anteriores: botellas vacías, vasos, bolsas, papeles…
Una auténtica vergüenza y que dejan una pésima imagen de ciudad, sobre todo en estas fechas que es transitada la zona por muchos paseantes