Béjar vive un atípico Domingo de Ramos, con la bendición de palmas en el interior del templo y sin procesión
Las celebraciones de Semana Santa se están adaptando al COVID-19 y así ha sido también este Domingo de Ramos. Estos nuevos tiempos impidieron la celebración de la procesión de ‘La entrada triunfal de Jesús en Jerusalén’ y la imagen de La Borriquilla se quedó- y ya van dos- sin salir por las calles de Béjar. Aun así, los devotos pudieron acercarse a la imagen, ya que la cofradía de la Vera Cruz la situó, con una bella decoración, en la entrada de la iglesia.
Además, el párroco, don Roberto Hernández, bendijo los ramos de olivo en el interior del templo, cuyo aforo estaba adaptado a las medidas restrictivas.