El sábado y el domingo las probabilidades de lluvia son muy bajas
Ya ocurrió el año pasado y se teme que vuelva a suceder. En 2022, el primer Corpus que se celebraba tras la pandemia, la lluvia quiso tener demasiado protagonismo en la celebración y es que la tormenta caída en las vísperas del Corpus se llevó por delante las alfombras de sal que se han elaborado con motivo de la Fiesta de Interés Turístico Internacional.
A pesar de este contratiempo, la ciudad lució con todo su esplendor el día del Corpus gracias a la colaboración de los voluntarios que lejos de venirse abajo, se animaron a rehacer las alfombras arruinadas por la lluvia.
La historia se repite y las cofradías y el Ayuntamiento vuelven a mirar al cielo en busca de una señal que les de el visto bueno para iniciar las alfombras de sal. Las previsiones meteorológicas no son buenas y a partir de este miércoles se espera agua, sin embargo, el sábado y el domingo las probabilidades de lluvia son muy bajas.
Con este panorama, nos explicaba Javier Maíllo, el encargado del engalanamiento de la ciudad, que las alfombras municipales no se van a hacer hasta el sábado: “no me quiero arriesgar a que estén hechas y venga una tormenta y se las lleve como ocurrió el año pasado. La idea es esperar al sábado por la noche y sí hay voluntarias hacerlas”.
El presidente de la Vera Cruz, David Hernández, se mostraba en la misma línea que Maíllo y aseguraba que “vamos a esperar a ver la evolución del tiempo antes de comenzar”.
Por su parte, la Seráfica Hermandad, como es habitual, no comenzará a preparar su altar hasta el sábado por la tarde, al igual que la Hermandad de Jesús Nazareno.
Mientras tanto, las hermandades y el Ayuntamiento van ultimando los detalles para las alfombras y los alteres como tintar la sal o preparar los elementos naturales de la decoración.
Ahora solo resta que la lluvia de una tregua y permita que Béjar vuelva a lucir este Corpus.
